El exquisito salmón gravlax de Noruega
El salmón gravlax es un plato tradicional de la cocina escandinava que se ha convertido en una exquisitez apreciada en todo el mundo. Esta delicada preparación, que resalta el sabor natural del salmón, es especialmente popular en Noruega, conocida por su excelente calidad en la pesca del salmón.
Origen e historia
El gravlax tiene sus raíces en la técnica de preservación del pescado utilizada por los pueblos nórdicos hace siglos. Originalmente, el salmón se enterraba en la arena o gravilla, lo que le daba su nombre gravlax (grav significa “enterrar” y lax es “salmón” en sueco). Esta práctica se utilizaba para curar y preservar el pescado durante los largos inviernos. Con el tiempo, la receta evolucionó hacia lo que conocemos hoy en día.
Elaboración del salmón gravlax
La preparación del salmón gravlax es simple pero requiere cuidado y tiempo. Se utiliza sal, azúcar, eneldo y, a menudo, enebro para sazonar el salmón fresco. Esta mezcla se frota sobre el pescado y se deja marinar durante un par de días. Durante este proceso, el sal y el azúcar extraen la humedad del salmón, lo que ayuda a preservarlo y le da su característico sabor. Una vez marinado, se corta en finas lonchas y se sirve, a menudo, con salsa de eneldo, pan de centeno o crema agria.
Propiedades nutritivas
El salmón gravlax es una fuente excelente de proteínas y ácidos grasos omega-3, beneficiosos para la salud cardiovascular. Además, al no ser sometido a cocción, conserva un alto contenido de nutrientes y enzimas.
Disfrutando el salmón gravlax
Este manjar se disfruta mejor en compañía de buenos amigos y en ocasiones especiales. El sabor y la textura del salmón gravlax son perfectos para acompañar una copa de vino blanco seco o una cerveza suave.
Receta rápida de salmón gravlax
- En un tazón, mezcla 1 taza de sal kosher, 1 taza de azúcar y 1 manojo de eneldo picado.
- Coloca la mitad de la mezcla en una bandeja para horno.
- Coloca encima un filete de salmón fresco, con la piel hacia abajo.
- Cubre con el resto de la mezcla y envuelve el salmón en film transparente.
- Deja marinar en el refrigerador durante 2-3 días, dándole la vuelta cada 12 horas.
- Lava el salmón, sécalo y córtalo en finas lonchas.
- Sirve con una salsa de eneldo o mostaza dijon.